Diario de sueños. 22/11/2014

"Me he enfadado y decido evadirme y explorar una zona medio selvática que sé que es peligrosa. Tengo que descender una pared muy inclinada, y a lo lejano se observan diferentes mecanismos de cuerdas que consisten en pruebas de preparación física a la par que trampas mortales. Mi padre viene a lo lejos e intenta aleccionarme diciendo que no voy a conseguir nada haciendo eso, y que regrese a casa. Aunque indignada y rencorosa, le hago caso y me dirijo de nuevo a esta escarpada subida. La he hecho otras veces pero por algún motivo esta vez me resulta super difícil, mi cuerpo es pesado y mis brazos débiles. A la par que subo, estando lago estancada, puedo ver mi reflejo sobre las rocas oscuras, específicamente el de mi rostro y sobre todo mis ojos. Logro ascender y llegar hasta arriba.

En ese momento estamos en conflicto con una especie de poblado pirata que consigue desbancar todos nuestros planes de conquista o invasión. Para poder hacerlo, los militares más preparados deben pasar estos mecanismos de cuerdas con éxito para poder acceder al poblado pirata y derrotarlo. Tres son los militares que están entrenando con trampas-prueba que se han reproducido según los originales en nuestro territorio. Cuando se disponen a enfrentarse a estas trampas antes de la invasión, todos vemos cómo el otro poblado ha cambiado los mecanismos y ahora el reto es completamente diferente. Uno y el mejor de esos tres militares es mi hermana Julia. Todo el mundo tiene sus esperanzas en ella por su agilidad, su destreza y su coraje. Examina desde lo lejano la nueva trampa y resuelve mentalmente cómo superarla. Todo el mundo la ve ponerse en marcha y comienza a vitorear, aplaudir y silbar."

Primer sueño. La imagen de mi hermana se muestra muy próxima a mí y puede que en algunos momentos me meta en sus pensamientos o su piel.

"Nos encontramos en el palacio/vivienda de la mujer con más poder del reino. Sobre ella recaen numerosos cargos por su poderosa influencia, y su carácter y sentencias tienen al pueblo bajo represión. Unas veinte personas que, de un modo u otro, nos hemos ganado su confianza, nos encontramos repartidos por  el palacio. Llegado un momento empezamos a hacernos la señal los unos a los otros y disponemos todo para la rebelión. Mientras unos,yo entre ellos ,la distraen, el resto comienza a prender fuego a diferentes cosas dentro de la casa. Cada uno se encarga de prender alguna cosa, y nos vamos desplazando por las diferentes salas pero ella parece no enterarse. En ciertos momentos yo aparezco a su lado y comienza a hablarme tranquila de sus cosas, pero yo no le presto atención. Llegamos a una sala llena de retablos, esculturas de madera, etc. de gran valor personal y económico, y la cosa se va poniendo en serio. Yo me hago con el poder de un mechero de cocina porque sé cuál es la siguiente sala y crece la emoción/tensión. En esta nueva sala se encuentran los cuadros de prestigiosos autores que ella más aprecia, los  vestidos de novia obsequiados por diferentes diseñadores de renombre, y de nuevo esculturas de madera de grandes dimensiones que también suponen un gran valor. Para que se de cuenta del complot y no tenga más remedio que rendirse, le obligaremos a ver por última vez su cuadro favorito antes de quemarlo. Pero yo paso esto por alto y me dirijo directa a prenderlo, sabiendo que es su favorito y que esa acción la destronará. Nuestro líder reclama al responsable y yo levanto el brazo, ateniendo a las consecuencias. Éste repara en que soy yo, y pregunta por alguna mujer rubia y de ojos azules. Una mujer embarazada levanta la mano y se le hace responsable de la acción. Cuando la anciana ha llegado a esta sala, el cuadro se ha apagado y restaurando, aunque sí prenden el resto de cosas de la sala. Nuestro líder le recuerda, desafiante, lo mucho que adora ese cuadro, y ella, pesadumbrosa y rendida, le da la razón y comienza a explicar su historia. Finalmente se prende el cuadro y con ello se declara la victoria de la rebelión. Con ello esta anciana poderosa queda desbancada del poder y toda si influencia y acreditación desaparece. Me siento satisfecha por la nueva situación, que tiene un significado especial para mí. Esta anciana es mi abuela."

Es la segunda vez que tengo este sueño, salvo que la primera vez no era mi abuela el gran enemigo que desacreditar ni tampoco prendía yo precozmente su cuadro favorito. El primero era más observación y el segundo participación.